Robleblog: Una propuesta para la FILBO

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El escritor Juan Carlos Botero, en días pasados, propuso acertadamente que la entrada a la Feria Internacional del Libro de Bogotá FILBO sea gratuita. Retomando la propuesta de Botero Zea, realizo a manera de comentarios y reflexiones las siguientes propuestas para la FILBO 2024. 

1. Que la entrada a la FILBO sea gratuita o en su defecto que el valor de la entrada sea abonada para el pago de un libro en los stands de las grandes editoriales, que pueden asumir a título de descuento el valor de la entrada. 

2. Ampliar los espacios de la FILBO. La Feria debe llevarse a cabo no solamente en las instalaciones de Corferias sino en espacios públicos como el Parque Simón Bolívar al mejor estilo de la Feria del Libro de Madrid. Con amplios espacios, zonas verdes para caminar, al aire libre, sin los tumultos que normalmente se presentan en las instalaciones de la feria. 

3. Ampliar las actividades de FILBO Ciudad. Las charlas, conferencias, presentaciones de libros y demás actividades de la feria, no solamente deben llevarse a cabo en las instalaciones de Corferias sino en parques públicos, universidades, colegios, centros comerciales, librerías y bibliotecas.

4. Retirar de la feria aquellas actividades que no guardan relación directa o indirecta con la fiesta del libro, tales como la venta de plantas y juguetes. Normalmente en esos stands los colegiales que asisten a la feria gastan sus escasos recursos en lugar de comprar un libro. 

5. Bajar el precio de los libros y aumentar las promociones. Las entidades involucradas en el sector literario deben propender por bajar el precio de los libros para aumentar el promedio de lectura anual de los colombianos. Desafortunadamente en la FILBO 2023 se observó un aumento del precio de los libros especialmente de las grandes editoriales, a diferencia del valor que cobran las editoriales independientes o las editoriales universitarias. 

6. Mejorar las instalaciones de la feria, especialmente los salones de conferencias en los cuales se entremezcla el sonido de las diferentes charlas que en forma simultánea se llevan a cabo; las áreas de alimentación para evitar que los visitantes tengan que consumir los alimentos de pie o sentados en el suelo o en las escaleras; así como el área de prensa, para que la música de las actividades lúdicas y el ruido de la feria no interfiera con las entrevistas o las transmisiones en vivo que realizan los periodistas culturales desde la feria.

7. Realizar la feria dos veces al año, una en cada semestre, con menor duración (1 semana), para que las actividades no saturen al visitante y no afecten el bolsillo de los compradores. 

8. Si bien es importante la masiva asistencia a la feria para las finanzas de los organizadores, la cantidad de visitantes no debe constituir el principal factor de calificación del éxito de la feria, sino que también debe incidir la calidad de los invitados y expositores. Desde hace varios años extrañamos la presencia en Bogotá de algún Premio Nobel de Literatura o algún Premio Cervantes; a diferencia, por ejemplo, del Hay Festival de Cartagena que este año contó con la presencia de cinco Premios Nobel. 

9. Aumentar el número de stands de los países asistentes a la FILBO, al fin y al cabo, se trata como su nombre lo indica, de la Feria Internacional del Libro de Bogotá y no de una feria literaria regional o binacional (Colombia y el país invitado de honor).